El presidente Petro puso sobre la mesa la posibilidad de revisar la normativa de cara a elevar la actividad productiva.
El presidente Gustavo Petro puso sobre la mesa una serie de propuestas económicas enfocadas en elevar la actividad productiva del país. Una de las que más llamó atención se relaciona con la posibilidad de tramitar una nueva reforma tributaria.
El mandatario explicó que la idea es revisar la normativa que se aprobó en 2022 para analizar sus impactos de cara a la productividad. Esto teniendo en cuenta que el articulado ha tenido varios cambios desde su aprobación derivados de decisiones judiciales.
En ese sentido, el jefe de Estado propuso que se tramite se haga con el propósito de bajar la tasa de tributación corporativa y se suba la declaración de renta de las personas naturales con los capitales más altos.
«La propuesta es bajar el impuesto de renta a las empresas y elevar el impuesto de renta a las personas naturales de más altos ingresos, es decir, a sus propietarios», explicó. De acuerdo con el Presidente, esta idea estaría orientada en tener estructuras tributarias similares a la mayoría de los países del mundo, a la vez que se contribuye a que las empresas crezcan y mejoren su rentabilidad.
Cómo ha sido recibida la propuesta
Desde diferentes sectores se han presentado opiniones respecto al planteamiento del primer mandatario.
Desde el frente político, el senador Humberto de la Calle destacó que “suena bien” bajarle los impuestos a las empresas y subírselos de forma progresiva a las personas naturales, “es lo razonable”. Además, señaló que fue algo que no se quiso tratar en la anterior reforma.
Por su parte, la representante Katherine Miranda expresó sus reservas en cuanto a cómo se llevaría a cabo el proceso para reducir la tasa corporativa y aumentar la renta a las personas naturales.
“Ya hubo un incremento significativo en la pasada reforma tributaria sobre las personas con mayores ingresos en el país. Hay que entender mejor esta propuesta del presidente, pues sería inaceptable que estemos pensando en tocar nuevamente a la clase media urbana del país”, señaló Miranda. La congresista también hizo la claridad de que es necesario bajar la tributación de las empresas, siempre y cuando se comprometan a abrir nuevas plazas de trabajo.
Por el lado de los centros de estudios, el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, señaló que desde la entidad se ha hecho énfasis en que un impuesto de renta del 35 % dificulta la competitividad y la creación de empleo en el país. En ese sentido, celebró que el mandatario haya abierto la puerta a este debate.
El director de investigaciones económicas de Corficolombiana, José Ignacio López, también se pronunció acerca del tema. López indicó que si bien bajar este impuesto a las empresas es «deseable», no parece factible en el corto plazo.
«El país inicia 2024 ya con un gasto público desfinanciado en al menos 1 % del PIB (si no casi 2 %). El reto en los dos próximos años es buscar atajar la expansión de gasto público, priorizando eficiencia. Y ojalá diseñar una senda de reducción de renta corporativa», expresó.
Fuente: Portafolio